Ingredientes:
- 4 huevos.
- 1 yogur limón
- 2 (vasos de your) de azúcar.
- 3 (vasos de harina).
- 1 sobre de levadura tipo Royal.
- 1 (vaso de yogur) de aceite de girasol.
- Mantequilla o Margarina para engrasar el molde, rellenado pan rallado o harina.
Elaboración:
Comenzamos rompiendo los huevos y separamos las claras de las yemas. Batiendo las claras hasta obtener un punto de nieve muy firme.
Le echamos un yogur de limón. Sobre el que añadiremos el azúcar en forma de lluvia y las yemas, todo ello sin dejar de batir. Utilizamos una batidora eléctrica.
Seguidamente incorporamos la medida de 3 vasos de yogur de harina y sobre de levadura tipo Royal, tamizando, es decir, pasada por un colador. Y añadimos la medida del vaso de yogur de aceite de girasol.
Untamos la cazuela-horno bien con mantequilla o margarina y echando un poco de pan rayado para que no se pegue la masa a la cazuela.
Colocar la olla sobre el fuego muy lento y mantenerla una hora a fuego lento y no destapar, no quitar la tapa hasta el final y una vez hecho esto pinchar un cuchillo para ver si el bizcocho
y si está hecho saldrá la punta del cuchillo limpia.
Desmoldar y dejar enfriar. Y listo, ya podemos disfrutar de nuestro bizcocho.
Recetario de Bizcocho Genovesa.
ERRORES:
El bizcocho no ha subido
Este suele ser uno de los problemas más comunes a la hora de hacer
bizcochos. Y es que son muchos los motivos que puede haber tras este
error, así que vamos a analizarlos uno por uno:
- La mezcla no está bien batida: Siempre es importante tamizar los
ingredientes secos y mezclarlos antes de añadirlos a la masa, para que
la levadura se reparta correctamente por todo el bizcocho. Si no lo has
hecho, puede ser que no se haya repartido bien y el bizcocho no suba por
igual por este motivo.
- La masa tiene demasiada harina / poca levadura: De nuevo, la
elaboración de un bizcocho es un puro proceso químico, y tenemos que ser
rigurosas en la medición de ingredientes. Si tu masa tiene demasiada
harina o poca levadura, el bizcocho no subirá y quedará apelmazado.
- La calidad de los ingredientes es mala: Unos ingredientes de mala
calidad también pueden estropear nuestro bizcocho. Lo que más afecta en
este problema son los huevos muy pequeños, una harina con demasiada
proteína, una levadura pasada o caducada, una grasa muy pesada o una
mantequilla de mala calidad.
- La temperatura de los ingredientes: es importante que los
ingredientes que usemos para nuestros bizcochos estén siempre a
temperatura ambiente. Si has utilizado ingredientes fríos, seguramente
no se hayan mezclado correctamente al hacer la masa, y además al hornear
partiremos de una temperatura inferior que no estará compensada, por lo
que el bizcocho seguramente no suba al no activarse la levadura.